La erliquia es una enfermedad infecciosa provocada por la bacteria Ehrlichia canis y afecta principalmente a los perros. Para trasmitirse, esta bacteria necesita de un vector, que en este caso es la garrapata. La infección puede permanecer activa unas semanas o cronificarse y provocar problemas a largo plazo, por lo que es importante detectarla y tratarla en fases tempranas.
Para hablar al respecto, TeleJunín Noticias entrevistó a Agustina Cacheiro, directora de zoonosis del Municipio de Junín, quien explicó los detalles de esta enfermedad y resaltó que hay distintos estadios de la enfermedad. “Desde una más leve hasta una enfermedad crónica donde puede haber una afectación de la medula ósea donde el perro va a presentar una anemia que es arregenerativa, es decir, que no hay posibilidades de que se regenere”, afirmó Cacheiro.
- ¿Y cómo se controla al vector?
- Los ectoparásitos, o sea esos parásitos que están fuera del animal, parasitan la superficie de la piel. Que son las pulgas, los ácaros, las garrapatas o los piojos, por ejemplo, se controlan mediante dos tipos.
Primero, medicando al animal. Eso lo va determinar cada veterinario y cada tipo de animal. Hay animales que por ahí no toleran el comprimido y sí la pipeta, hay callares repelentes…en fin, hay muchos métodos.
Pero lo que la gente tiene que comprender es que son animales o artrópodos que el 80% de su ciclo ocurre en el medioambiente. Entonces, si yo el control del ectoparásito lo hago solamente sobre el animal, estoy dejando el 80% librado al azar, que es el ambiente. O sea, no estoy atacando ni al huevo, ni a la larva, ni a la pupa.
Entonces siempre que se haga sobre un animal tiene que hacerse sobre los animales que conviven y el medioambiente también.
- ¿Cuáles son los síntomas del perro? ¿Cómo se puede detectar?
- Los síntomas dependen del estadío de la enfermedad en que se encuentre. Lo que generalmente más se nota es cuando el perro está con decaimiento, con temperatura, deja de comer, a veces puede tener sangrado por nariz. Incluso hay animales que presentan síntomas gastroentéricos. El abanico de síntomas es muy amplio.
Para saber si tiene temperatura se toma de manera rectal con un termómetro y, si no, muchas veces se nota porque el hocico está seco y más caliente. Ellos tienen una temperatura normal más alta que la nuestra. Para un perro 38.2° – 39.2° es una temperatura normal.
- Los casos que hubo en Junín, ¿fueron en perros de la calle o en perros que tienen dueño o están controlados?
- Yo puedo hablar de mi clínica particular, no puedo hablar de la parte de zoonosis porque no es una enfermedad de notificación obligatoria, como sí lo son la rabia, brucelosis, sitacosis, que son enfermedades zoonóticas, es decir, que se transmiten del animal al hombre. Por lo tanto, en mi clínica privada, hemos tenido casos de perros de la calle y casos en animales con dueños responsables y completamente cuidados.
La gente dice “mi animal no sale de mi casa”, pero la garrapata trepa paredes e incluso la podemos traer nosotros en el calzado. No hace falta que el perro no salga a la calle. Y otra cosa importante es que dejaron de ser bacterias netamente estacionales para ser anuales.
Antes, este tipo de ectoparásitos tenían un ciclo favorecido por las altas temperaturas y la humedad. Pero hoy en día, muchos animales pasaron a formar parte de la familia viviendo adentro del domicilio.