Olas de calor extremas, fuertes tormentas, sequía e incendios y un otoño e invierno con condiciones más frías que lo habitual son algunos de los eventos meteorológicos más destacados en la Argentina que vienen teniendo lugar desde enero hasta diciembre de 2022.
Los datos surgen del reporte preliminar del clima que elaboró el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y que sirve como insumo para el Plan de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático que el Gobierno nacional presentó en la 27° Conferencia de las Naciones Unidas de 2022 (COP27) en la ciudad de Sharm El Sheikh, Egipto.
Por ejemplo, otro informe del SMN sostiene que este año se vivió el noviembre más cálido alguna vez registrado (+1.8°C), y varias localidades rompieron el récord de temperatura máxima media más alta para ese mes.
Es preciso destacar que en lo que va del año hubo cinco fuertes tormentas que azotaron a Junín, la Región y el resto de la provincia de Buenos Aires, que pusieron en alerta a la población, con caída de árboles, postes de luz, cables, cortes de energía eléctrica y voladuras de techos.
En efecto, cuatro de los eventos climáticos ocurrieron en los primeros meses del 2022, más precisamente el 2 de febrero; 7 y 24 de marzo; y el 27 de abril.
El quinto tuvo lugar este jueves a la madrugada: además de serios daños materiales, un trabajador de la obra de la autopista (el juninense Carlos Calabró) perdió la vida al tumbarse la casilla en la que se encontraba, producto del viento.
En nuestra ciudad, el fuerte viento, acompañado de lluvia y granizo, provocó ese día la caída de cables, árboles, ramas, y postes de luz. También, se registraron voladuras de techos como consecuencia de las fuertes ráfagas, de entre 70 y 100 kilómetros por hora. Los equipos del municipio, Defensa Civil, Bomberos, Policía y la empresa EDEN aún continúan trabajando para neutralizar, en primer lugar, los peligros que ocasionó el temporal, como por ejemplo los árboles caídos, algunos de los cuales se derrumbaron sobre viviendas y automóviles.
Por su parte, las cuadrillas están solucionando el resto de los inconvenientes. Es que las tareas para subsanar los daños llevarán varios días de trabajo, se informó.
Fuentes del municipio informaron a Democracia que se volaron diecisiete techos y, en todos los casos, las familias fueron asistidas, al tiempo que no se registraron evacuados. Asimismo, se calcula que cayeron más de 50 árboles.
Las zonas más afectadas fueron La Favela (en frente del Cementerio del Oeste), Benito de Miguel y Padre Respuela, donde las ráfagas golpearon con mayor intensidad, aunque hubo roturas y complicaciones en casi todos los barrios.
La compañía eléctrica EDEN cambió más de 80 postes caídos durante el jueves y otros 40 fueron reemplazados durante la jornada de ayer, afirmó a Democracia Fernando Favarolo, jefe de la sucursal local de la distribuidora.
Ayer, otra tormenta también surcó los cielos de Junín y la zona y generó el derrumbe de cables del tendido eléctrico y de algunos árboles.
Presión de agua y lagunas
En el marco de una sequía extrema por la falta de lluvias, desde noviembre se vienen registrando en Junín altas temperaturas que han llego a rozar los 40 grados, lo que marcó un nuevo récord histórico para el mes pasado. El anterior había sido de 38,5°, el 22 de noviembre de 2003.
A raíz de esta ola de calor registrada en primavera, en varios barrios de la Ciudad ya se empezó a sentir la falta de presión del agua corriente, como consecuencia de un uso por parte de los vecinos que buscan encontrar un poco de calma ante las altas temperaturas. Además, ha descendido en grandes magnitudes el nivel de agua en las lagunas del Partido, como en la de Gómez y Mar Chiquita, en la localidad de Agustina.
Al respecto, el titular de Obras Públicas, Marcelo Balestrasse, informó a Democracia que en Mar Chiquita “hay una sola compuerta abierta de estiaje, para que pueda llegar algo de agua a la de Gómez, donde ocurre lo mismo”.
Y destacó que “hay un protocolo que se sigue y hay que esperar las grandes lluvias en la cuenca norte, aguas arriba, para que esto vuelva a su condición normal”. Además, informó que, dentro de las acciones del Municipio de Junín, se busca concientizar a los vecinos de la Ciudad para que tengan un uso racional del agua corriente para que se mantenga la presión.
En este sentido, sostuvo que el trabajo de Obras Sanitarias es “más complejo, ya que en estas condiciones se demanda más agua. Se está trabajando en un plan de concientización para pedirles a los vecinos que cuiden el agua porque las napas están cada vez más bajas y cuesta más tener la presión necesaria para distribuir el agua corriente a toda la red”.
“Son épocas complejas, hay que trabajar también en la prevención porque la napa va bajando y el esfuerzo es más grande. Y si a eso sumamos poca tensión eléctrica, hay pozos que se van apagando y hace que no haya presión de agua normal de otras épocas no tan calurosas”, concluyó.
En relación al fenómeno "La Niña" (falta de lluvia), informaron que “nos va a afectar hasta febrero aproximadamente. Esto también trae consecuencias en el área económica de nuestra Región”.
Mesa del Agua
A raíz de la extremada situación climática que atraviesa la provincia de Buenos Aires, en octubre de este año, el Gobierno de Junín convocó a actores de la comunidad vinculados a la actividad agropecuaria y turística con el objetivo de establecer un ámbito de trabajo y acción para hacer frente a la situación con la Mesa del Agua.
Precisamente, la apertura del taller estuvo a cargo del intendente municipal, Pablo Petrecca, quien manifestó su agradecimiento a todos los presentes y dijo: "Sin dudas que están aquí porque esta problemática les interesa y preocupa, ya que la actual situación de sequía es alarmante. No es la primera que estamos atravesando y los informes que podemos leer, de especialistas y del Servicio Meteorológico Nacional, son preocupantes sobre el futuro".
"Las lluvias caídas en la zona núcleo son las más bajas en los últimos 100 años, y esta situación nos llevará a una importante pérdida económica", detalló el jefe Comunal, respecto del impacto de la sequía en la actividad agropecuaria. También hizo mención del impacto negativo sobre la actividad turística, recordando que "ya se han vivido momentos tristes, con peces muertos y cianobacterias en nuestras lagunas".
“Quedó claro que el impacto mayor de este cambio climático se ve en las ciudades, donde debemos comenzar a generar un cambio, obligando a la comunidad a trabajar junta. Debemos tomar acciones para preservar recursos vitales para la vida humana, como el agua potable, con lo cual insisto, esto requiere el compromiso de todos para trabajar en conjunto para hacer frente a esta situación", concluyó.
Referentes del INTA y de la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Junín fueron los encargados de compartir con todos los presentes, información y datos estadísticos sobre esta problemática y destacaron la puesta en marcha de este ámbito de trabajo, denominado, Mesa del Agua.
Hernán Rivero, de la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Junín manifestó: “En la presentación mostré las napas o el estado en el que está el agua dentro del perfil del suelo, que por el tema de la sequía están muy por debajo de los dos metros que es la distancia máxima que los cultivos pueden explorar con sus raíces. Mostré como evidencia un par de sitios que hay en la zona de Junín, donde colocamos unos freatímetros para tal propósito analítico”.
En tanto, Fabricio Navone, otro de los integrantes de la asociación que nuclea a los ingenieros agrónomos, expresó: “Hicimos un comparativo de la campaña 21/22 con la actual, vemos una reducción en el área en el orden del 35%, hoy tenemos cosechables 16.500 hectáreas y estimamos un rinde promedio a la actualidad de 1200 Kg. por hectárea, en contraposición de los 3900 del año pasado; esto nos arroja unas 100 mil toneladas menos de producción dentro del Partido de Junín, con el impacto económico que esto trae aparejado”.
Por su parte, María Guadalupe Tellería, del INTA, declaró: “Hicimos un trabajo comparativo sobre lo que venía pasando en las últimas campañas, por medio del cual observamos que mientras que el promedio histórico de nuestra zona es de 1007 mm para los últimos 70 años, la campaña pasada cerramos con 675 mm y en la actual estamos solamente en los 405 mm. Estamos muy por debajo de los promedios con el impacto tremendo que esto tiene en los cultivos y el suelo”.
“En lo que respecta a los cultivos también se vivió una cierta anomalía climática con algunas heladas ocurridas en el mes octubre, que los afectaron de manera muy importante”, dijo Tellería, y agregó: “Los pronósticos trimestrales para octubre, noviembre y diciembre indican un 50% de probabilidades de que las lluvias continúen en un promedio por debajo del normal”.
Además, mencionó que “presentamos unos informes con imágenes vinculadas a la evolución de las superficies de agua, tanto en lagunas permanentes como en cuerpos de agua, donde vimos una reducción muy importante a nivel de agua superficial, algo que pudimos constatar por medio de imágenes satelitales”.
23 millones de ha, en sequía severa
La superficie sembrada que se encuentra bajo condición de sequía severa - que implica una marcada falta de humedad en los suelos y el ambiente y la pérdida casi total de lo implantado- casi se triplicó en los últimos meses al sumar un total de 22,9 millones de hectáreas, concentradas mayormente en el área agrícola central del país, según el último informe elaborado por la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías.
Ante la falta de precipitaciones, el área con sequía severa se extendió desde las 7.166.428 hectáreas registradas en septiembre a 22.935.713 hectáreas en octubre, con foco en el norte de la provincia de Buenos Aires, sur de Entre Ríos, centro-sur de Santa Fe y noreste de San Luis. Así, el crecimiento de la superficie que se encuentra bajo condición extrema fue de 15,8 millones de hectáreas en solo un mes; mientras que la extensión total bajo condición de sequía avanzó de 22,3 millones de hectáreas a un total de 163,6 millones en el mismo período.
En su último informe, la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías -integrada por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, el Servicio Meteorológico Nacional y demás organismos nacionales y académicos- detalló que 78 partidos bonaerenses, 17 distritos de Córdoba, 13 de Santa Fe, 9 de Entre Ríos y 8 de San Luis se encuentran bajo condiciones de sequía severa.
Esto se da en un contexto en el que persisten "las condiciones de déficit hídrico en la región central del país", en especial en la denominada zona productiva núcleo que comprende al norte de Buenos Aires y el sur de Córdoba y Santa Fe.
De cara al futuro el dato a tener en cuenta es que durante el último fin de semana se registraron eventos de lluvia locales que favorecieron el almacenaje de agua en suelo, algo que hasta el momento no alcanza para revertir las condiciones de sequía.
En cuanto a la humedad en los suelos, el trabajo señaló que "se observan valores bajos de humedad del suelo e insuficiente para la demanda de aquellos maíces que fueron sembrados en el norte de Buenos Aires, sur de Santa Fe, sur de Córdoba y oeste de Entre Ríos". Todo esto generó el "retraso en fechas de siembra, fuerte impacto en ganadería, con descarga de campos, ventas de vientres y suplementación", detalló el informe de la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías.
Soja y maíz
Por su parte, el último informe sobre estimaciones agrícolas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) señaló que si bien durante la semana se logró un avance en las labores de siembra de soja de 9,6 puntos porcentuales (pp), el retraso en la implantación de la oleaginosa es de algo más de 17 pp respecto a la campaña anterior.
De hecho, en algunas zonas como el núcleo sur o el centro-este de Entre Ríos, ese retraso escala a los 33,5 y 37,2 pp respectivamente, lo que podría tener considerables efectos en los potenciales rendimientos del cultivo.
A la fecha, las labores de implantación de la soja se posicionó en el 29,1% de las 16,7 millones de hectáreas previstas para el cultivo. Por el lado del maíz, los avances de las sembradoras son casi nulos, con progresos semanales de 1,6 pp hasta cubrir el 25,4% de las 7,3 millones de hectáreas estipuladas.
Otra vez caídas de árboles y postes de luz
Fuertes rafagas de viento y lluvia volvieron a abatirse, ayer, sobre nuestra ciudad, con caídas de árboles y postes de luz, que dejaron fuera de servicio de energía eléctrico en amplios sectores. Debido a ello, personal de la Municipalidad, de Defensa Civil y de Bomberos debió intervenir, primero para neutralizar los peligros y luego para liberar algunas calles, que estaban obstaculizadas por plantas y ramas de grandes dimensiones.